Desearía ser un poco distraído, pero que mal que tengo
encima, soy capaz de darme cuenta de cosas que no quisiera saber, de ver
momentos que no quisiera ver, de llegar en el momento menos indicado en el
lugar menos indicado, pero dicen que de todo lo malo sale algo bueno, les diré
que salió de todo esto.
Día cualquiera, voy caminando de noche, calle a media luz,
gente escasa, pocos carros, yo parado para coger el bus que me lleve a donde
quiero ir, a lo lejos un vagabundo deambula en la esquina, delante del camina
un señor de edad adulta, una funda en su mano y una plutera que la siento a
media cuadra, de pronto se activa los instintos animales de aquel vagabundo, y
sigilosamente y dos segundos se encuentra detrás del borracho, y con un movimiento
casi perfecto su mano se introduce en el bolsillo del desdichado viejo, su plutera
y su sueldo acaban de desaparecer, la lección
invitar a chupar al vagabundo.
Sentado en un restaurante, casi termino mi plato, de pronto
la bulla de una mesa me distrae, dos mujeres y un hombre los protagonistas, la discusión
que se puede ori a leguas gira en torno
a que parece que él conoce a las dos chicas pero ellas no se conocen,
entonces y de pronto una maniobra sacad
de la película rocky V una de ellas lanza un jack de derecha que alcanza a la
otra, se armo el relajo y yo estoy a dos metros de esa guerra y donde el enemigo llámese el hombre “desdichado”
desapareció, la lección no llevare a mi pareja a ese restaurante
Esto es solo algo de lo que pasa cuando no puedes distraerte
fácilmente, y bueno no está mal gracias a ello puedo escribir y no tengo por
qué cambiar, espero no ser así siempre, espero no sean así ustedes, y espero darme cuenta de muchas cosas tarde… bien
tarde.